Devocional Cielos Abiertos

ÉL PUEDE CURAR LO INCURABLE

Memoriza: “He aquí que yo soy Jehová, Dios de toda carne; ¿habrá algo que sea difícil para mí?” Jeremías 32:27

Lee: Marcos 2:1 – 12

Jesús sana a un paralítico

Entró Jesús otra vez en Capernaum después de algunos días; y se oyó que estaba en casa. E inmediatamente se juntaron muchos, de manera que ya no cabían ni aun a la puerta; y les predicaba la palabra. Entonces vinieron a él unos trayendo un paralítico, que era cargado por cuatro. Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico. Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados. Estaban allí sentados algunos de los escribas, los cuales cavilaban en sus corazones: ¿Por qué habla este así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados, sino solo Dios? Y conociendo luego Jesús en su espíritu que cavilaban de esta manera dentro de sí mismos, les dijo: ¿Por qué caviláis así en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate, toma tu lecho y anda? 10 Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): 11 A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. 12 Entonces él se levantó en seguida, y tomando su lecho, salió delante de todos, de manera que todos se asombraron, y glorificaron a Dios, diciendo: Nunca hemos visto tal cosa.

BIBLIA EN UN AÑO: Oseas 10 – Joel 2

MENSAJE

En Marcos 2:1 – 12 leemos la historia del hombre que estaba paralítico del cuello para abajo. Esa era una situación que está más allá de la medicina. Él era incurable, pero cuando el hombre se puso en contacto con el Señor Jesucristo, Aquel que cura lo incurable, su parálisis se fue en unos segundos. Dios bendiga a todos los médicos, pero muchas veces, la gente va al médico y éste analiza la situación y dice “Lo siento, no hay nada que podamos hacer para ayudar”. Sin embargo, hay un Sanador que es más grande que cualquier médico, y puede cambiar el informe médico. En Su nombre ahora, estoy declarando que cualquier informe médico negativo que hayas recibido es cambiado a tu favor ahora en el nombre de Jesús.

Escuché un testimonio que me hizo saltar y bailar inevitablemente. El que testificaba dijo que una uña se había clavado en su ojo, y el doctor le había dicho que no se podía hacer nada para devolverle la vista. Aquel que cura lo incurable cambio el informe y tres días después de que le hubieran dicho que nunca más podría recuperar la vista en ese ojo, él empezó a ver. Los doctores solo pueden tratar de reparar las partes del cuerpo. Mi Padre no tiene que reparar; Él reemplaza las partes del cuerpo. Así pues, cuando una parte del cuerpo se daña tanto que no se puede reparar, Aquel que cura lo incurable entra en escena para reemplazarlo sin dejar rastro ni señal de que la persona haya estado alguna vez enferma. En la antigüedad, la lepra era incurable. incluso hoy, cuando ves a un leproso que ha sido curado, puedes ver señales de la lepra porque los dedos, los nudillos e incluso los lóbulos de las orejas se habrán deteriorado Sin embargo, cuando mi Dios limpió a Naamán en 2 Reyes 5:14, su piel se volvió como la de un bebé recién nacido. Decreto que todo informe médico que es esté en contra de tu gozo y bienestar será cambiado en el nombre de Jesús.

Jesucristo puede curar lo incurable cuando tú clamas a Él con un corazón puro, pero ¿no es incluso mejor si tú nunca caes enfermo? Si Aquel que cura lo incurable vive en ti, si viene alguna enfermedad a atacar tu cuerpo, será rechazada por el poder de Jesucristo. Apocalipsis 3:20 dice que Él está a la puerta de tu corazón ahora mismo, llamando y esperando a que tu abras tu corazón a Él. Quizás digas “Ya he dado mi vida a Cristo, ¿por qué entonces Dios no me ha curado? Analiza detenidamente ¿realmente vives en santidad? ¿Estás viviendo en completa obediencia a la palabra de Dios?

PUNTO CLAVE: Si Aquel que cura lo incurable está en ti, ninguna enfermedad puede sobrevivir en tu cuerpo.