Memoriza: «Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor» 2 Corintios 3:18
Lee: Mateo 13:8; Mateo 13:23
Mateo 13:8
8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
Mateo 13:23
23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, este es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.
BIBLIA EN UN AÑO: 1 Corintios 8:1 – 13; Salmos 132 – 135
MENSAJE
Esta es la última categoría de corazón según su condición en la parábola del sembrador. Aquellos en esta categoría son receptivos a la palabra de Dios. Están siempre preparados para escuchar las palabra de Dios y cuando lo hacen, escuchan con atención y contentos. Nunca menosprecian a ningún predicador de la palabra, van a la presencia de Dios con sus corazones preparados, por lo que resulta fácil para ellos comprender la palabra de Dios. También tiene un corazón que está libre de todo deseo mundano, así que es fácil que la palabra germine y produzca fruto.
La gente en esta categoría pueden asemejarte a aquellos que se miran al espejo de la palabra y son cambiados de gloria en gloria (2 Corintios 3:18), porque nunca se olvidan de la imagen que representa la palabra para ellos, en vez de eso, son totalmente transformados. Son verdaderos creyentes porque viven conforme a la palabra de Dios. Son buenos ejemplos a seguir porque hacen la palabra. ¿Dónde perteneces tú hoy?
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, haz de mi corazón una buena tierra para Tu palabra siempre, para que pueda ser transformado y llevar buenos frutos.