Memoriza: «El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.» Marcos 16:16
Lee: Marcos 16:15 – 17
15 Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. 16 El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado. 17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
BIBLIA EN UN AÑO: Romanos 14:1 – 23; Salmos 103 – 104
MENSAJE
Poco después de que Jesús empezara Su ministerio en la tierra, Él fue al río Jordán para ser bautizado por Juan el Bautista, y los Cielos se abrieron inmediatamente después. Una lección vital de esto es que si tú eres realmente nacido de nuevo y te bautizas por inmersión, los Cielos se abrirán sobre ti.
Una de las razones para el bautismo en agua es el identificarse con la muerte, la sepultura y la resurrección de nuestro Señor Jesús. También es una demostración pública del cambio que está sucediendo dentro de nosotros. Este cambio debe de ser evidente para todo aquel que está en contacto con nosotros. Además, el bautismo en agua sella tu entrada en el Cielo (Marcos 16:16)
Tristemente, muchas Iglesias están realizando el bautismo de la forma equivocada, como el rociar agua, o bautizar a un bebe, o a alguien que está viviendo en pecado. Jesús ya estableció un ejemplo perfecto de cómo debe de hacerse el bautismo, y si todos nos adherimos a esto, habrá una afirmación espiritual de que la persona es hijo/hija de Dios. Si fuiste bautizado de manera errónea, asegúrate de que haces lo necesario para corregirlo.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Apúntate a las clases de preparación para el Bautismo si aún no has sido bautizado.