Memoriza: “Por tanto, Jehová el Dios de Israel dice: Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de mí perpetuamente; mas ahora ha dicho Jehová: Nunca yo tal haga, porque yo honraré a los que me honran, y los que me desprecian serán tenidos en poco.” 1 Samuel 2:30
Lee: Proverbios 3:9 – 10
9 Honra a Jehová con tus bienes,
Y con las primicias de todos tus frutos;
10 Y serán llenos tus graneros con abundancia,
Y tus lagares rebosarán de mosto.
BIBLIA EN UN AÑO: Salmos 125 – 131
MENSAJE
En matemáticas, hay algo que llamamos la ley del movimiento de Newton. Una parte de ella dice que por cada acción, siempre hay una reacción igual y opuesta. En otras palabras, lo que siembres es lo que cosecharás. Tu comportamiento determinará lo que Dios hará en respuesta. Por eso la lectura Bíblica de hoy dice que debes honrar al Señor con tus primicias y entonces Dios responderá con tantas bendiciones que tu lagares rebosarán. Darle ofrendas a Dios, darle a Él tu primer fruto, esto es, tu primer ingreso del año, es una señal para mostrarle que le honras. Cuando le das a Él, Él se complacerá en ti y te responderá honrándote también.
La calidad de tu ofrenda también es una seña que muestra a Dios si le honras o no. Un mendigo te debe pedir dinero, quizás le des la moneda más pequeña que tengas en tu bolsillo pero, si es un hombre rico el que pide dinero, le darás mucho dinero porque no estás dando para ayudarle, sino para honrarle. Dios sabe cuánto dinero tienes. Él es Aquel que te dio a ti primero. La calidad de la ofrenda que tú le das de tus primicias le dirá si tu le honras a Él o no. Créeme honestamente, Dios presta mucha atención a la ofrenda que tu le das. Si no me crees, lee Marcos 12:41 – 44. Él se sentó y estaba mirando mientras que todos traían sus ofrendas a la cesta de las ofrendas. Mientras les miraba, también les puntuaba y la persona que tuvo la puntuación más alta fue la pobre viuda, porque ella dio todo lo que tenía – ella honró a Dios. Cuando Dios puntúe tu ofrenda, ¿se sentirá honrado o ignorado por lo que tú le estás dando?
Amado, nunca hagas nada que pueda hacer que Dios se sienta ignorado. El Dios Altísimo no es alguien con quien puedas jugar en absoluto. Él quizás sea cordero, pero también es león. 1 Samuel 2:7 dice,
"Jehová empobrece, y él enriquece; Abate, y enaltece."
Como nos gusta decir en Niger, el que hizo el lápiz también hizo la goma. Aquel que te hizo rico también te puede hacer pobre. Aquel que te levantó también puede hacerte descender. Por lo tanto debes de huir de cualquier cosa que pueda hacerte deshonrar o ignorar a Dios.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, cualquier cosa que yo haga que te deshonre, no permitas que yo lo haga nunca más Señor.