Memoriza: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” Juan 3:16
Lee: Romanos 6:18
18 y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.
BIBLIA EN UN AÑO: Hechos 19:21 – 41; Salmos 19 – 21
MENSAJE
La verdadera libertad está en el evangelio de Jesucristo. La libertad que Jesús da lo abarca todo; y lo más importante, está libre de pecado. Jesús vino a salvarte de tus pecados, así que ¿Cuál es el hábito pecaminoso o vicio que la constitución del país en el que vives te ha dado la libertad de practicar, como las drogas, el aborto, la homosexualidad, etcétera? Cuando éramos jóvenes, pensábamos que la mejor forma de olvidar nuestros problemas era beber hasta emborracharse, hasta que nos dábamos cuenta de que la pena continuaba cuando se te iba la borrachera.
La única persona que puede dar un gozo duradero o libertad es el Señor Jesucristo. Por favor acepta Su invitación hoy, confiesa tus pecados y decide no volver a ellos. Después, toma pasos prácticos para poner punto y final a ese hábito reemplazando el objeto de pecado. Por ejemplo, compra más frutas y vegetales para que cuando tengas ganas de consumir drogas, en vez de eso, te sacies de frutas. Llena tu teléfono con canciones cristianas para que cuando sientas ganas de ver porno, en vez de eso, puedas escuchar música. Finalmente, busca alguien a quien rendir cuentas, una persona con la que puedas hablar sobre tus dificultades para que pueda orar contigo y vigilarte en tus actividades diarias.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Enumera los vicios que cometes, y dos formas prácticas para parar de hacerlos. En oración actúa sobre ellos.