Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

HABLANDO CON JESÚS

Memoriza: “Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.” Mateo 7:7

Lee: Mateo 6:5 – 13

Jesús y la oración

Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis. Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. 11 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. 12 Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. 13 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.

BIBLIA EN UN AÑO: Hechos 2:1 – 47; Nehemías 1 – 3

MENSAJE

Un hombre definió una vez la oración a su hijo de doce años como el acto de hablar al aire, creyendo que alguien está escuchando, y después añadir “en el nombre de Jesús”. Esto muestra que la oración es un forma simple de comunicación que consiste en al menos cuatro partes: la primera, la adoración, la cual implica alabar y adorar a Dios por quién es. La segunda, es la confesión de pecados; cuando oramos, es importante que confieses y te arrepientas de tus pecados para que tu oración no sea una abominación a los ojos de Dios, como declara Proverbios 15:8. La tercera parte es la súplica: aquí, tienes que dar a conocer tu petición a Dios pero es mejor orar en el Espíritu Santo. Romanos 8:26 dicd que nosotros no sabemos cómo orar, pero cuando oras en el Espíritu, oras la mente de Dios. Entonces culminas tu oración con la acción de gracias, siendo agradecido por todo en todo lo que Dios ha hecho.

Por lo tanto, necesitas orar con confianza, sabiendo que Dios contesta oraciones, y puedes hablar con Él en cualquier lugar, en diferentes posturas, como por ejemplo de rodillas, caminando, sentado, de pie, acostado, mientras lees, etcétera.

siempre que clames a Dios, Él responderá.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Ora por lo menos treinta minutos hoy, usando las cuatro partes de la oración.