Devocional Cielos Abiertos

POR QUÉ NECESITAS LA UNCIÓN DIVINA II

Memoriza: ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.” Santiago 5:14

Lee: 1 Juan 2:27

27 Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.

BIBLIA EN UN AÑO: Ruth 2; 1 Samuel 1

MENSAJE

Los yugos representan la atadura y los hay de diferentes tipos. El yugo de la enfermedad es terrible para cualquiera y tiene que ser completamente destruido. Por eso necesitas unción divina para destruir el yugo de la enfermedad. Este fue un yugo que ató a un hombre durante treinta y ocho años al estanque de Betesda (Juan 5:2 – 9). El yugo de la enfermedad le hizo perder treinta y ocho años de su vida, pero fue liberado de esa atadura cuando se encontró con la unción que hay en Jesucristo. Ningún hijo de Dios debe de estar atado por el yugo de la enfermedad, ya que Su unción está disponible para nosotros como vemos en nuestro versículo a memorizar de hoy.

Una iglesia que no tiene la unción de Dios no es digna de asistir a ella porque la Iglesia es la última esperanza del enfermo, especialmente las dolencias descritas por los médicos ortodoxos como incurables o terminales. Los testimonios de sanidad divina en nuestros programas de la Iglesia confirman la importancia de la unción de Dios, particularmente cuando se trata de destrucción de yugos de enfermedad.

Una caso que me viene a la mente es el de la hermana cuyo doctor le dijo que moriría en unas horas. Su marido la dejó en el hospital para invitar a su amante a pasar la noche con él en su casa. ¿Qué pasa con tu esposa? le preguntó la amante. “A ella solo le quedan unas horas de vida antes de morir en el hospital” el marido infiel contestó, pensando que la esposa estaba a las puertas de la muerte. Para la gloria de Dios, esa misma noche, la unción destruyó el yugo de enfermedad en la vida de la hermana; ella se dio de alta a ella misma del hospital y se fue directa a su casa, donde se encontró a su esposo con la amante.

Los pañuelos que llevan unción divina han destruido yugos de enfermedad, una y otra vez.

La unción también sirve como arma de defensa en contra del ataque del enemigo. Salmos 105:15 dice, “No toquéis, dijo, a mis ungidos, Ni hagáis mal a mis profetas.”. Amado, a medida que buscas la unción del Dios Todopoderoso, toda situación problemática que estás enfrentando será resuelta para Su gloria, en el poderoso nombre de Jesús.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Necesitas la unción para vencer los obstáculos espirituales. Búscala con una persona verdaderamente entregada a Dios.