Devocional de los Cielos Abiertos, Miércoles 19 de Enero de 2022: Que se Haga la Luz III
Te alabo y te adoro a Ti mi Padre, porque Tú eres el único Dios que da sin añadir tristeza.
Mi Padre, Tú eres el Dios Todopoderoso, el Maestro Estratega, el Arquitecto a cargo del universo y el Gran Constructor de todos los tiempos.
Gracias Jesús por dejar todas Tus riquezas en gloria, para hacerte pobre por mi, para que a través de Tu pobreza, yo pueda ser rico.
Padre, si en alguna forma yo he caído fuera de Tu gloria, por favor, ten misericordia y perdóname, que Tu misericordia prevalezca sobre todo juicio de pecado en mi vida, en el nombre de Jesús.
Padre, que toda oscuridad de pobreza en mi vida, desparezca, y abre las puertas de Tu prosperidad para mi, en el nombre de Jesús.
Padre, que Tu luz brille en mi vida hoy y cause que toda forma de oscuridad de pobreza en mi vida huya de mi, para siempre, en el nombre de Jesús.
Padre, que todo enemigo de mi éxito financiero y prosperidad en mi vida, en mis negocios, toda falta de oración en mi vida, toda pereza, pérdida de tiempo, maldición, ect, sea paralizada en el nombre de Jesús.
Padre, por favor, bendice verdaderamente, que Tus manos sobre mi mantengan la maldad alejada de mi vida, y ensancha mis costeras, en el nombre de Jesús.
Padre, cualquier plan perfecto que Tu tienes para mi vida, que los enemigos han distorsionado a través del poder de la oscuridad, por favor, restáuralo, en el nombre de Jesús.
Padre, bendice a Tu hijo el pastor Enoc A Adeboye y no permitas que la oscuridad de pobreza prevalezca sobre su vida y su ministerio en el nombre de Jesús.
Padre, que toda dificultad, obstáculo o impedimento para que estos puntos de oración lleguen a Tus hijos a tiempo, y diariamente, sea quitado en el nombre de Jesús.
Di ahora tus peticiones personales (Filipenses 4:6).
En el nombre de Jesús, oramos (Juan 14:13 – 14, 15:16).Gracias Padre por contestar a nuestras oraciones, y Señor, que Tú continúes contestando, en el nombre de Jesús. (1 Tesalonicenses 5:18)
En fe, dale gracias a Dios por haber contestado a tus oraciones. Tus testimonios son innegables, en el poderoso nombre de Jesús.
Hasta mañana