Memoriza: «Si fueres limpio y recto, Ciertamente luego se despertará por ti, Y hará próspera la morada de tu justicia.» Job 8:6
Lee: Salmos 97:10 – 11
10 Los que amáis a Jehová, aborreced el mal;
Él guarda las almas de sus santos;
De mano de los impíos los libra.
11 Luz está sembrada para el justo,
Y alegría para los rectos de corazón.
BIBLIA EN UN AÑO: Jeremías 7 – 11
MENSAJE
Dios es Santo, Su morada es santa, y Él debe de ser adorado en la belleza de su santidad (Salmos 96:9). La morada del Señor es el lugar donde Dios bendice a Su pueblo con diversos tipos de bendiciones – espirituales, físicos y materiales. Sin embargo, solo el puro y recto puede ser habitado por Dios, solo las personas en las que el Señor habita pueden disfrutar de las bendiciones de la presencia de Dios, que garantiza seguridad, de acuerdo con Salmos 91:1 que dice;
"El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente."
Si vives en santidad, lo haces para ti mismo, porque el Señor guarda al justo, de acuerdo con Salmos 5:12. También, hay una promoción para aquellos que permanecen en la morada del Señor, de acuerdo con Hebreos 1:9, que dice;
"Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros."
El precio de vivir una vida de justicia es lo que aquellos que quieren permanecer en la morada del Señor deben pagar. La lectura Bíblica de hoy enfatiza la necesidad de justicia si queremos acceder a la protección.
Nadie descuida su más preciada posesión. Todo aquel que elige vivir una vida consagrada disfrutará de protección divina. Esas personas son piedras preciosas a los ojos del Señor. El Señor guarda Su herencia. Por eso la Escritura dice;
"Porque no reposará la vara de la impiedad sobre la heredad de los justos; No sea que extiendan los justos sus manos a la iniquidad."
Dios prometió morar en las alabanzas de Israel – Su pueblo (Salmos 22:3). La cuestión es sin embargo, «¿Eres tú parte del pueblo de Dios?» Solo puedes ser parte de Su pueblo si aceptas a Jesucristo como tu Señor y Salvador y estás viviendo una vida en justicia. Es la mejor decisión que cualquier persona pueda hacer jamás.
Dios guarda al justo bajo Su protección y se asegura de que los malvados no le hagan caer. Mi oración es que el Dios Todopoderoso mora en tus alabanzas, y Él llenará tu vida con bendiciones que irán más allá de tus expectativas, en el nombre de Jesús.
PUNTO CLAVE: Comprométete a vivir en santidad y el Dios Todopoderoso hará de ti Su morada ahora y siempre.