Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

HÁBITOS DE ALIMENTACIÓN

Memoriza: “Oye a tu padre, a aquel que te engendró; Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.” Proverbios 23:22

Lee: Proverbios 23: 6 – 8

No comas pan con el avaro,

Ni codicies sus manjares;

Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.

Come y bebe, te dirá;

Mas su corazón no está contigo.

Vomitarás la parte que comiste,

Y perderás tus suaves palabras.

MENSAJE

Un área que muestra si un hijo tiene una buena educación en el hogar es su disposición en cuanto a la comida, particularmente en público. Por ejemplo, cualquier persona que como grandes cantidades o mordiscos de comida carece de normas de etiqueta.

Cuando visitas a una familia y te preguntan si quieres comer, tu respuesta debe ser que No. Cualquiera que realmente quiere entretenerte con comida, te ofrecerá una copa de agua y un refresco o snacks primero antes de preguntarte si quieres comer.

Cuando te ofrecen una comida, da gracias al que te la da y a otros adultos en la casa después de haber comido. Ten en cuenta que está mal hacer ruido al masticar cuando comes.

Siempre mastica con la boca cerrada y evita eructar con la boca abierta. También, nunca hables con la boca llena. Si tienes que hacer cola para que te sirvan en un evento social, evita correr incluso si tienes mucha hambre.

Algunos comportamientos que no consideras importantes quizás hagan que los no creyentes no acepten a Jesús. Además, es importante actuar como la realeza que eres.

PUNTO CLAVE: Que la gente vea a Cristo incluso en la manera en la que comes.