Devocional Cielos Abiertos

LA ÚNICA FUENTE DE AYUDA

Memoriza: “Los que miraron a él fueron alumbrados, Y sus rostros no fueron avergonzados.” Salmos 34:5

Lee: Salmos 121

Jehová es tu guardador

Cántico gradual.

121 Alzaré mis ojos a los montes;

¿De dónde vendrá mi socorro?

Mi socorro viene de Jehová,

Que hizo los cielos y la tierra.

No dará tu pie al resbaladero,

Ni se dormirá el que te guarda.

He aquí, no se adormecerá ni dormirá

El que guarda a Israel.

Jehová es tu guardador;

Jehová es tu sombra a tu mano derecha.

El sol no te fatigará de día,

Ni la luna de noche.

Jehová te guardará de todo mal;

Él guardará tu alma.

Jehová guardará tu salida y tu entrada

Desde ahora y para siempre.

BIBLIA EN UN AÑO: Esther 6 – 10

MENSAJE

Imagina cómo de rico se sentiría un hombre que está dispuesto a hacer cualquier cosa por su mujer, si ella fuera a uno de sus inquilinos – un graduado conocido por ser mujeriego, y le suplicara que le diera pan. Esta analogía por mi apta que pueda parecer, no se acerca a describir lo terrible que es cuando un Cristiano busca ayuda de otra fuente que no sea Dios.

Cuando los humanos apartan la mirada de Dios y empiezan a considerar a seres inferiores, incluyendo el diablo, para que les ayuden, esto es idolatría. Tristemente, muchas personas no saben que la ayuda duradera solo puede venir de Dios y no de esos seres (Zacarías 10:1 – 2). Nuestra única fuente verdadera de ayuda es el Dios Todopoderoso, con quien no hay imposibilidades (Lucas 1:37). No es de extrañar que el Salmista diga en Salmos 121:1 – 2;

"Alzaré mis ojos a los montes;¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra."

En 2 Reyes 6:27, un mujer había buscado ayuda con el rey durante el acoso en contra de Samaria. Gracias a Dios que el rey era lo suficientemente sabio para saber que él no podía hacer nada por si mismo. Su sincera declaración muestra la verdadera vanidad de buscar ayuda de otra fuente que no sea Dios. Dios, por otro lado, prometió a Sus hijos en Isaías 41:9 – 10;

"... Mi siervo eres tú; te escogí, y no te deseché. No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia."

Amado, examínate: ¿de quién estás buscando ayuda? Estás cometiendo una gran equivocación si no estás buscando la ayuda del Dios Todopoderoso. Te animo a tener fe totalmente en Dios para esa ayuda que necesitas urgentemente, Él no te fallará. Nuestro versículo a memorizar de hoy nos da ésta seguridad. Tú también testificarás desde hoy, en el poderoso nombre de Jesús. Todo lo que necesitas es estar segura de que tienes una relación Padre – hijo con el Dios Todopoderoso y déjale el resto a Él.

El Señor es tu único verdadera fuente de ayuda. Clama a Él hoy. Si aún no has nacido de nuevo, arrepiéntete de tus pecados y confiésalos al Señor. Entrega tu vida a Jesucristo y entonces clama a Él para cualquier ayuda que necesites. Él ciertamente te ayudará.

PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, manda Tu ayuda hoy, en el poderoso nombre de Jesús.