Estudio Biblico

VASIJA PARA HONRA

PARTE 5

INTRODUCCIÓN

Las lecciones anteriores nos han enseñado, que las vasijas para honra son elegidas por el Maestro mismo. Son elegidas para servir tanto al maestro como a sus invitados. Son el punto de enlace entre el Maestro y todos los demás. Y si fallan en su labor, son descartadas de inmediato.

Ahora, queremos aprender más de las responsabilidades de estas vasijas y sus efectos sobre los demás. Que Dios despierte nuestro entendimiento a medida que estudiamos a Sus pies. Amén.

EL SEÑOR JESÚS ES UN REY GLORIOSO: NO NECESITAS AVERGONZARTE DE ÉL

No hay razón terrenal para estar avergonzado del testimonio de nuestro Señor Jesucristo. Él es el Rey de reyes y porque pertenecemos a Él, somos reyes también. De hecho, somos la gente más poderosa de la tierra. En consecuencia, no tenemos nadie a quien temer. En vez de eso, debemos de ser fuertes y enseñar a la gente lo que sabemos sobre Cristo y animarles a enseñar a otros también. Porque no sólo debemos de tener hijos espirituales, nuestros hijos espirituales deben de ser animados a tener sus propios hijos también.

2Tim. 1:7-11; 2:1-3; Tit. 1:5; Juan 15:8; Prov. 11:30-31; Is. 27:6; Is. 55:10-13.

EL SEÑOR TIENE UN AMOR ESPECIAL POR LOS HIJOS: ÉL QUIERE QUE ELLOS TAMBIÉN SEAN  SALVOS

No debemos de olvidar que los hijos pueden comer con el Maestro de la Casa incluso cuando los adultos no pueden acercarse. En consecuencia, las vasijas para honra deben de ser conscientes de sus responsabilidades hacia los hijos también. Podemos decirles que los problemas que nuestra nación está afrontando han sido causados por el fracaso de nuestros padres en prestar atención a las advertencias de Dios. En consecuencia, necesitamos aprender de nuestros errores y seguir a Cristo ahora. Debemos de darnos cuenta de que no podemos estar con nuestros hijos para siempre, pero la palabra de Dios estará con ellos tanto si estamos como si no.

Salmos 78:2-8; 147:3-4; Zacarías. 1:2-6; Rom. 15:1-4; I Cor 10:11; II Tim. 3:14-17; Heb. 11:3-5; II Ped. 1:12-15; 3:1-12.

LAS VASIJAS PARA HONRA SON SIEMPRE POCAS; PERO SU IMPACTO PUEDE SER TREMENDO

Las vasijas para honra son siempre pocas, tan solo un remanente, pero sus efectos son siempre grandes; como aquellos de rocío y carneros. Todo el mundo los necesita y solo tienen que trabajar como un equipo porque puede individualmente hacer todo lo que hay que hacer. Dios los necesita también.

Mica. 5:7; Rom. 1:14; Hechos 20:26-28; 1Cor. 3:12-18; Gen. 18:17-19; Salmos. 71:17-18; Juan 14:12-14, 16:23-24; Mat. 21:22.