Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

UNA FUERTE LLUVIA

Memoriza:“Dios, pues, te dé del rocío del cielo, Y de las grosuras de la tierra, Y abundancia de trigo y de mosto.” Génesis 27:28

Lee: Malaquías 3:8 – 12

¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas.

Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado.

10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.

11 Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice Jehová de los ejércitos.

12 Y todas las naciones os dirán bienaventurados; porque seréis tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos.

MENSAJE

Cuando Isaac estaba a punto de transferir la bendición generacional, después de que Jacob le provocará con una deliciosa comida, él le pidió a Dios que bendijera desde el cielo.

De acuerdo con Malaquías 3:10, el Cielo tiene ventanas. Piensa en ello, hay más ventanas en cualquier casa que puertas. Esto significa que cuando Dios dijo que Él abriría las ventanas del cielo a las personas que pagan sus diezmos, esto simplemente muestra una gran estructura de bendiciones generacionales.

Aun con la controversia que rodea al tema de pagar el diezmo, Dios sigue manteniendo Su palabra en el asunto. En los medios sociales, algunos no creyentes trata de disuadir a los jóvenes de pagar sus diezmos en la iglesia porque sienten que esto es un fraude.

Yo solía pensar así también, hasta que Dios me convenció de que permanecería pasando penurias si no daba ofrendas y pagaba mi diezmo. El 100% de mi salario no es suficiente para cubrir mis gastos, pero cuando empecé a pagar un diezmo del 10%, recibí un aumento exponencial.

Como soy matemático, aumenté mi diezmo. Dejé de pagar el 10% hace mucho tiempo y no me arrepiento. Tu también puedes disfrutar de una ventana de lluvia de bendiciones incluso desde tu juventud.

PUNTO CLAVE: Diezmar es una acto de obediencia a la palabra de Dios.