PARTE 2
INTRODUCCIÓN
En la primera parte de esta seria hemos aprendido que una vasija para honra debe de estar incorrupta. También hemos clasificado los pecados que pueden corromper a una persona, en tres categorías que son:
- Pecados cometidos con las manos
- Aquellos cometidos con la lengua
- Y sobre todos, aquellos cometidos desde el corazón.
Hoy, a medida que continuamos en esta serie, queremos usar otra clasificación de pecados, clasificados en tres categorías que son
- Pecar contra nosotros mismos.
- Pecar contra otra persona.
- Y pecar en contra de Dios.
En este estudio, trataremos las dos primeras categorías para descubrir cómo pueden corromper una vasija para honra y causar que sea rechazada.
Que el Señor hable a nuestros corazones a medida que estudiamos a Sus pies, en el Nombre de Jesús.
UNA PERSONA PUEDE PECAR EN CONTRA DE SI MISMA
El pecado significa que una vasija falla en ser lo que puede o lo que está obligada a ser. Por eso la palabra más común para pecado puede ser traducida como “pérdida de rumbo, o perder el objetivo”. Las parábolas de los talentos, la sal que ha perdido su sabor, la higuera que se negó a llevar frutos, etc, son ejemplos ilustrativos de lo que el Señor considera que es un pecado. Mientras que, no se espera de las personas que sean iguales en habilidades o logros, si que se espera de ellas que sean iguales en esfuerzo. Sentarse en la valla a mirar y no actuar, es un pecado a los ojos de Dios.
Mat. 25:14-30; Mat. 5:13; Lucas 13:6-9; Mat. 7:18; 16:24-25; Apocalipsis. 3:15-16.
LOS PECADOS EN CONTRA DE OTROS PUEDEN CLASIFICARSE TAMBIÉN EN TRES CATEGORÍAS
- Es un pecado el no responder y reaccionar a las necesidades humanas, es decir, es un pecado tanto el ver a alguien necesitado y permanecer inmóvil, como el pasar de largo o cruzar a la otra cera; o el no conocer a los demás hasta tal punto de no ver sus necesidades, es decir, es un pecado el no tener compasión por los demás.
- En segundo lugar, es un pecado el no congregarse con otros, ya que, la falta de comunión es el resultado de la falta de amor. Una brecha o el distanciarse de la persona es una brecha o distanciarse con Dios.
- En tercer lugar, es un pecado muy grave el hacer que otros pequen, poner una piedra de tropiezo en el camino de otros.
Mat. 25:31-46; Lucas 10:25-27; Prov. 21:13; Mat. 18:21-35; Lucas 15:25-32; 16:19-31; Mat. 5:43-48; 5:23; Lucas 18:9-14: Mat. 18:6-7.
TODOS LOS PECADOS SON EN CONTRA DE DIOS
Todos los pecados son en realidad, en contra de Dios. Pero en particular, pecar es hacer cosas a nuestra voluntad deliberadamente, en vez de hacerlas según la voluntad de Dios. En segundo lugar, pecar es jactarse, esto es, ponernos en el centro de atención, en vez de poner a Dios como centro de atención. En tercer lugar, ya que Dios es amor, todos los pecados son pecar en contra del amor, rechazar deliberadamente el honrar la invitación amorosa de Dios, aceptar lo que Dios sabe que es mejor para nosotros.
Salmos. 51:4: Mat. 4:1-11; Mat. 15:1-9; 6:1-18: 23:1-12; 22:1-10; 11:20-22; Marcos 3:22-30.