Memoriza:“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” 2 Corintios 5:17
Lee: Juan 3:3 – 6
3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.
4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?
5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu,[a] espíritu es.
BIBLIA EN UN AÑO: 2 Reyes 16 – 20
MENSAJE
Uno de las señales más notorias de que una persona ha nacido de nuevo es el carácter nuevo de la vida que vive desde ese momento. Este cambio de sus estándares de vida a nivel espiritual son siempre obvios. Zaqueo, el publicano encontró a Jesucristo en Jericó, su vida ya no fue la misma. El recolector de impuestos que era notoriamente corrupto dijo:
"...He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado." - Lucas 19:8
Hoy en día, muchas personas confiesan que han nacido de nuevo, pero siguen con su estilo de vida pecaminoso, como si nada en ellos hubiera cambiado. El ladrón sigue robando y aún así dicen que han nacido de nuevo. La mujer adúltera que tuvo éxito en robarle a otra mujer a su marido con el que se había casado legalmente, sigue viviendo con toda las comodidades con ese hombre, aún así, ella habla en lenguas!.
Cuando una persona verdaderamente nace de nuevo, la vida de esa persona debe mostrar que la transformación realmente ha ocurrido. Juan el Bautista, cuando se dirigía a aquellos que querían ser bautizado por él, les animaba a llevar fruto de verdadero arrepentimiento. El verdadero arrepentimiento nos conduce al cambio y a la transformación de una vida de pecado. La Biblia dice:
"Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: !!Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento" Mateo 3:7 - 8
Los líderes religiosos de los tiempos de Juan el Bautista se humillaron y vinieron a él para ser bautizados para obtener crecimiento espiritual. Esta es la lección que aquellos que dicen haber surgido de las filas de la iglesia y los ministerios establecidos: hay una necesidad constante de buscar el crecimiento espiritual. Esto quizás también va para muchas de las antiguas generaciones que ahora se unen a la experiencia Pentecostal. Ese tipo de personas deberían sin embargo, de asegurarse de llevar “fruto de arrepentimiento”, dejando atrás su estilo de vida y hábitos pecaminosos.
Un espíritu regenerado es uno que ha pasado por un proceso de cambio. Quizás haya que cambiar de amigos, de forma de comer, o vestirse u cosas parecidos, para poder conformar a la imagen del Hijo del Dios Viviente.
Que el Señor te haga una nueva criatura verdaderamente, en el poderoso nombre de Jesús.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Examina tu vida con detenimiento y haz todos los cambios necesarios y requeridos para convertirte en una verdadera nueva criatura en Cristo.