Memoriza:«Me es necesario hacer las obras del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie puede trabajar.» Juan 9:4
Lee: Santiago 4:13 – 17
No os gloriéis del día de mañana
13 !!Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y ganaremos;
14 cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.
15 En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello.
16 Pero ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala;
17 y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.
MENSAJE
Dicen que el tiempo no espera a nadie. Si has de ser productivo cada día, debes de planear el tiempo que vas a dedicar a cada tarea o actividad cada día.
Cuando mis hijos eran más jóvenes, solían pensar que era muy difícil vivir conmigo, porque no tolero la pereza o el perder el tiempo en absoluto. Ahora sin embargo, lo entienden mejor.
A veces, duermo por solo cuatro horas porque tengo muchas tareas que hacer al día. Nunca tuve una queja por no haber completado una tarea a tiempo.
Todos tenemos las mismas 24 horas al día, aún así, algunas personas consiguen mucho más con su tiempo que otras. El secreto es tener una agenda diario o escribir una lista de cosas por hacer, que te ayude a seguir un orden.
El hecho es que nunca habrá suficiente tiempo al día. Evita los chismes innecesarios, reduce el tiempo que pasas en las redes sociales, y descansa cuando sea el momento.
No dejes ninguna parte de tu vida al azar, planea cada día. La única persona que puede cambiar mi plan es Dios, pero yo normalmente planeo mi año por adelantado, para que nada me sorprenda.
PUNTO CLAVE: Consigue un diario, planea tus actividades y tus objetivos para el año, por meses, semanas y después por días.