DEVOCIONAL DE LOS CIELOS ABIERTOS
Memoriza:»El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente.« Salmos 91:1
Lee: Salmos 91
Morando bajo la sombra del Omnipotente
91 El que habita al abrigo del Altísimo
Morará bajo la sombra del Omnipotente.
2 Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
3 El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.
4 Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
5 No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
6 Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
7 Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.
8 Ciertamente con tus ojos mirarás
Y verás la recompensa de los impíos.
9 Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,
Al Altísimo por tu habitación,
10 No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.
11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.
12 En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.
13 Sobre el león y el áspid pisarás;
Hollarás al cachorro del león y al dragón.
14 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;
Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.
15 Me invocará, y yo le responderé;
Con él estaré yo en la angustia;
Lo libraré y le glorificaré.
16 Lo saciaré de larga vida,
Y le mostraré mi salvación.
BIBLIA EN UN AÑO: Job 3 – 4
MENSAJE
Las promesas de Dios en Cristo son Si y Amén (2 Corintios 1:20), esto significa que cualquier promesa que Dios hace a todos los creyentes en Cristo, definitivamente sucederá, Isaías 26:1 – 3 también dice:
"En aquel día cantarán este cántico en tierra de Judá: Fuerte ciudad tenemos; salvación puso Dios por muros y antemuro. Abrid las puertas, y entrará la gente justa, guardadora de verdades. Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado."
para que una persona disfrute de esta benevolencia sin embargo, tiene que cumplir algunas condiciones. Primeramente, tienes que haber nacido de nuevo (Juan 3:3, 5). En segundo lugar, tiene que creer cada palabra que procede de la boca de Dios – esto es fe. Puedes demostrar que crees en la palabra de Dios obedeciéndola. Santiago 1:22 – 25 dice «Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos… sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.»
Cuando un hombre hace la voluntad de Dios como se contempla en Su palabra, se le inspira a confiar en el Señor para sus milagros. ¿Recuerdas la historia de Daniel? Después de que fuera echado al foso de los leones, el rey fue temprano por la mañana para confirmar que el Dios de Daniel es grande y poderoso. Él preguntó «…Daniel, siervo del Dios viviente, el Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves, ¿te ha podido librar de los leones?» (Daniel 6:20). En vez de leones rugiéndole al rey, era Daniel quien respondió con la voz de triunfo. Él dijo, «…Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño, porque ante él fui hallado inocente; y aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho nada malo.» (Daniel 6:21 – 22). La experiencia de Daniel estaba en línea con la palabra del Señor en Isaías 43:2, la cual dice;
"Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti."
Ten en cuenta sin embargo, que Daniel fue capaz de disfrutar de la protección de Dios porque vivió una vida de santidad. Isaías 59:1 – 2 claramente muestra que la iniquidad impide que Dios salve a una persona. Desde este día, la protección divina estará contigo en el nombre de Jesús. Asegúrate sin embargo, de que estás habitando en el lugar secreto del Altísimo, en justicia (Salmos 91:1- 3).
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, pro favor guárdame en Tu perfecta paz en todo momento. Solo en ti confío.