Devocional Cielos Abiertos

UN TOQUE DIVINO

DEVOCIONAL DE LOS CIELOS ABIERTOS

Memoriza:“Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.” Mateo 9:29

Lee: Mateo 9:20 – 22

20 Y he aquí una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto;

21 porque decía dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva.

22 Pero Jesús, volviéndose y mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. Y la mujer fue salva desde aquella hora.

BIBLIA EN UN AÑO: Salmos 43 – 45

MENSAJE

Hay un poder tremendo en un toque divino. Un toque divino puede ser positivo o negativo. Naamán concía el poder de un toque divino; por eso se decepcionó cuando Eliseo no salió a recibirle en Samaria. 2 Reyes 5:11 lo describe así:

"Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra."

Aparte del toque de Dios en una persona para sanidad, una persona puede igualmente tocar al Divino con sus manos de fe y ser sanado, de acuerdo con nuestra lectura Bíblica de hoy. Hace algunos años, durante una de nuestras Convenciones en el Campo de Redención en Nigeria, el Señor nos pidió que diéramos un trozo de tela para que la gente lo tocara por fe, para que pudieran recibir milagros. Sin embargo, Él nos advirtió de que la gente debía solo tocar y no agarrar la tela. Un hombre fue y agarró la tela en vez de tocar; se necesito una gracia especial de Dios para que el hombre no muriera, pues empezó a temblar desde la mañana hasta la noche. Mientras que otros obtuvieron su milagro por un toque de fe, él obtuvo “tembleques” por su falta de fe.

Un toque divino puede devolver a la vida al muerto como vemos en la historia de la viuda de Naín (Lucas 7:11 – 15). La biblia dice que Jesús solo tocó el féretro del hijo de la viuda y le ordenó que se levantara; eso fue todo. Oro por ti: El Dios Todopoderoso tocará esa situación desagradable y reirás la final de todo, en el nombre de Jesús. La viuda de Naín se rió al final gracias a un toque de parte del Autor de la vida. Un toque que se origina en la fe puede obrar tanto en la persona que está tocando como en la persona que va a ser tocada. En Mateo 9:29 – 30, dos ciegos clamaron a Jesús por sanidad. Cuando Jesús averiguó que los dos hombres tenían la fe necesaria, Él tocó sus ojos y recobraron la vista.

Se necesita un toque de fe para conseguir un milagro. Que tu fe sea lo suficientemente fuerte para conseguirte un toque divino para que puedas tener grandes testimonios, en el poderoso nombre de Jesús.

PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor toca las áreas de mi vida que necesitan de tu toque divino. Que mi gozo sea completo, en el poderoso nombre de Jesús.