DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS
Memoriza:“Porque si el árbol fuere cortado, aún queda de él esperanza; Retoñará aún, y sus renuevos no faltarán.” Job 4:7
Lee: 2 Reyes 4: 1 – 7
El aceite de la viuda
4 Una mujer, de las mujeres de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo, diciendo: Tu siervo mi marido ha muerto; y tú sabes que tu siervo era temeroso de Jehová; y ha venido el acreedor para tomarse dos hijos míos por siervos.
2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.
3 El le dijo: Ve y pide para ti vasijas prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacías, no pocas.
4 Entra luego, y enciérrate tú y tus hijos; y echa en todas las vasijas, y cuando una esté llena, ponla aparte.
5 Y se fue la mujer, y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos; y ellos le traían las vasijas, y ella echaba del aceite.
6 Cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme aún otras vasijas. Y él dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite.
7 Vino ella luego, y lo contó al varón de Dios, el cual dijo: Ve y vende el aceite, y paga a tus acreedores; y tú y tus hijos vivid de lo que quede.
BIBLIA EN UN AÑO: Josué 22 – 24
MENSAJE
Cuando Dios entra en cualquier situación, Él cambia todo. Dios puede transformar a un deudor en alguien que presta a naciones, Él puede convertir a una viuda indigente en la persona más rica de la comunidad.
Hay una bonita historia en la lectura Bíblica de hoy; ilustra cómo Dios puede cambiar la historia de una persona, siempre que ésta sea obediente. Cuando tienes un encuentro con Dios, solo necesitas llevar a cabo las instrucciones divinas que se te dan para que tu historia se convierta en un punto de referencia de los milagros de Dios. La viuda que había perdido toda esperanza, tuvo un encuentro con Dios a través de Su profeta, Eliseo, y su historia cambió para bien.
Podemos aprender unas cuentas cosas de la viuda. Verás que ella clamó por ayuda desesperadamente. Amado, si alguien que está desesperanzado ha de recibir ayuda de “Nuestro Pronto Auxilio en las Tribulaciones” (Salmos 46:1), esa persona debe de clamar a Dios en desesperación. Dios quiere intervenir en los asuntos de aquellos que claman a Él por ayuda. Jeremías 29:13 dice;
"y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón."
Cualquiera que hace el esfuerzo de buscar a Dios, ciertamente le encontrará. Sin embargo, mientras decidas arreglártelas sin clamar a Dios en oración, seguirás en tu condición actual. Cuando tu estás realmente cansado de tu situación, como la mujer en la lectura Bíblica de hoy, clamarás a Dios en desesperación. La Biblia no dijo que la viuda había hablado con Eliseo, más bien dice que ella clamó a Él porque necesitaba desesperadamente un milagro. Ella no murmuró ante el profeta, tampoco se quejó para captar su atención, ni buscó la simpatía de la gente. En vez de eso, ella clamó por una intervención divina, obtuvo la atención de los Cielos y su problema fuer resuelto permanentemente.
Al clamar a Dios hoy, Él te contestará y cualquier situación sin esperanza en tu vida cambiará para bien. La esperanza se levantará para ti y cantarás una nueva canción de victoria en el poderoso nombre de Jesús.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Clama a Dios hoy y pídele que intervenga a tu situación.