DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS
Memoriza:“Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.” Efesios 4:32
Lee: 2 Corintios 5:18 – 20
18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;
19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.
20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: Josué 1 -3
MENSAJE
Desde que Adán y Eva cayeron y decidieron amar lo que Dios odiaba, el pecado trajo enemistad entre el hombre y Dios (Génesis 3:6). Desafortunadamente esta distancia ha seguido creciendo porque la codicia de los ojos, la codicia de la carne, y el orgullo de la via siguen siendo parte del hombre hoy en día. (1 Juan 2:15 – 16).
Dios, sin embargo, en Su misericordia, decidió reconciliar a la humanidad consigo mismo ofreciendo a Su Hijo – Jesús, para morir por los pecados del mundo. Él quiere hacer de los humanos Sus hijos y como el padre del hijo pródigo, Dios está esperando pacientemente a que el hombre vuelva a casa para la felicidad eterna. Mateo 5:9 dice;
"Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios."
¿Quienes son los pacificadores? Los pacificadores son aquellos que conocen su enemistad con Dios, y se apartan de su estilo de vida pecaminoso y empiezan a vivir una vida agradable a los ojos de Dios. En 2 Corintios 5:18 – 19, Pablo dijo;
"Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.."
¿Te has reconciliado con el Señor, tu Creador?. No te olvides de que los bendecidos son los pacificadores porque serán llamados jijos de Dios (Mateo 5:9). Después de reconciliarte con Dios, también debes de esforzarte por estar en paz con cualquiera que te haya ofendido o a quien tú hayas ofendido. El tipo de reconciliación que haría a cualquiera apto para llegar al Cielo debe de ser de doble sentido, como vemos en el versículo a memorizar de hoy.
El perdón es también la clave para la conciliación perfecta. No podemos ser reconciliados con Dios si Él no nos perdona; pero Él lo hizo misericordiosamente.
Nosotros también debemos de perdonarnos los unos a los otros para que nuestra reconciliación sea completa.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Reconcíliate con Dios a través del verdadero arrepentimiento hoy. Si aún no eres nacido de nuevo, reonciíiate también con ese hermano o hermana con el que te has distanciado antes de qu sea demasiado tarde.