Devocional Cielos Abiertos

UN TIEMPO PARA HUIR III

UN TIEMPO PARA HUIR III

Memoriza: «Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.» 1 Corintios 10:14

Lee: Deuteronomio 4:23 – 24

23 Guardaos, no os olvidéis del pacto de Jehová vuestro Dios, que él estableció con vosotros, y no os hagáis escultura o imagen de ninguna cosa que Jehová tu Dios te ha prohibido.

24 Porque Jehová tu Dios es fuego consumidor, Dios celoso.

BIBLIA EN UN AÑO: Juan 9 – 10

MENSAJE

Nuestro Dios es un Dios celoso. Odia compartirte con otro dios. Por eso debes de huir de la idolatría. Idolatría significa adorar a ídolos. Cualquier cosa que tu estimes más que a Dios es un ídolo, ya sea que lo estés haciendo consciente o inconscientemente. Por eso necesitas examinar a quien estás adorando en todo momento. Para algunas personas, es su trabajo. No bromean con su trabajo para nada; incluso cuando choca con la voluntad de Dios, su trabajo es prioridad. Jesús dijo:

«Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.» Lucas 16:13

En el momento que tu fuente de ingreso se ha vuelto tan importante que le das prioridad por encima de Dios, estás sirviendo a un ídolo. Muchas personas dejan la mayoría de su dinero en casa a propósito y van con unas simples monedas a la Iglesia porque saben que Dios puede pedirles que den más de lo que ellos han planeado dar. Cuando Dios le dice a algunas personas que siembren una semilla que no quieren sembrar, enseguida le dicen a su pareja que saben que él o ella estarán en desacuerdo, entonces vuelven a dios y le dicen «Señor, ves que yo quería sembrar, pero mi marido o mi mujer se ha negado» Te olvidas de que Dios puede ver tu corazón (Proverbios 16:2). Cuando Dios le dijo a Abraham que sacrificara a Isaac para Él, Abraham podría habérselo dicho rápidamente a Sara, sabiendo que Sara escondería al chico. Él sin embargo, se quedó callado, ni siquiera le dijo nada al chico que era el que había de ser sacrificado. Este es un corazón que no pone a nada ni a nadie por encima de Dios.

Dios no quiere ninguna otra posición en tu corazón más que el número uno. En el momento en el que algo más está compitiendo con Él, Él se va. Él dijo que debes de ser o frío o caliente; si eres tibio, Él te vomitará de Su boca (Apocalipsis 3:16).

Una vez le dije a un hermano que íbamos a evangelizar un lunes y que me gustaría usar su coche. Él inmediatamente respondió que necesitaba el coche para ir a trabajar. Entonces le aseguré que todos los vehículos que necesitábamos ya estaban preparados; que solo le estaba poniendo a prueba. Él ni siquiera podía usar el transporte público para ir a trabajar por un solo día para que la palabra de Dios pudiera ser predicada a las almas perdidas.

En algún momento, Dios te pedirá que elijas entre Su voluntad y algo o alguien que amas mucho. Espero que elijas a Dios.

Reflexión: ¿Es Dios realmente el primero en tu vida?