LECCION 17: PODER DE LOS PACTOS DE SANGRE
VERSÍCULO A MEMORIZAR: «De donde ni aun el primer pacto fue instituido sin sangre.» Hebreos 9:18
PASAJE BÍBLICO: Hebreos 9:15 – 28
15 Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto,[a] para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.
16 Porque donde hay testamento,[b] es necesario que intervenga muerte del testador.
17 Porque el testamento con la muerte se confirma; pues no es válido entre tanto que el testador vive.
18 De donde ni aun el primer pacto fue instituido sin sangre.
19 Porque habiendo anunciado Moisés todos los mandamientos de la ley a todo el pueblo, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos, con agua, lana escarlata e hisopo, y roció el mismo libro y también a todo el pueblo,
20 diciendo: Esta es la sangre del pacto que Dios os ha mandado.
21 Y además de esto, roció también con la sangre el tabernáculo y todos los vasos del ministerio.
22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
El sacrificio de Cristo quita el pecado
23 Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos.
24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
25 y no para ofrecerse muchas veces, como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre ajena.
26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.
27 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio,
28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan.
INTRODUCCIÓN: Promesas, votos, hipotecas y juramentos se usan indistintamente como declaración o seguro de que uno hará algo o que esa cosa en particular pasará. Sin embargo, el pacto de sangre es el acuerdo que más nos compromete. Implica cortar y derramar sangre. Por lo tanto, en este estudio intentaremos ahondar en el significado y el poder salvador en la sangre de Jesús.
SIGNIFICADO DEL PACTO DE SANGRE
No podemos hablar de pactos espirituales sin hablar de la sangre. Todo pacto espiritual se acciona a través del derramamiento de sangre. Por lo tanto ni siquiera el primer pacto fue dedicado sin sangre. (Hebreos 9:18). La diferencia entre el pacto y la colaboración es que el pacto implica sangre. Los pactos del Antiguo Testamento eran sellados con la sangre de la circuncisión (Hechos 7:8) y los sacrificios de animales, pero en el Nuevo Testamento, con la sangre de Jesucristo (Hebreos 9: 11 – 14). Por lo tanto, el pacto de sangre es el sello de la Biblia (Hebreos 9:18, Lucas 22:20). Cuando entendemos el pacto de sangre y quiénes somos, así como lo que tenemos en el Señor Jesús, ya no estamos atados a nuestros sentimientos, y podemos levantarnos con valentía (Hebreos 4:15 – 16). Este pacto de sangre, hecho en nuestro nombre, por Jesucristo, es una promesa permanente y un pacto irrompible (Génesis 17:7, Gálatas 3:17).
EL PODER SALVADOR EN LA SANGRE DE JESÚS.
Todo ser humano tiene la oportunidad de ser reconciliado con Dios a través del pacto de sangre con el cuerpo de Cristo, el Salvador, que murió por nosotros. La sangre de Jesús personifica el pacto de salvación (1 Corintios 11:25). Recibimos la justicia de Dios, no por nuestra valía, sino por el pacto que se hizo mucho tiempo antes de que nosotros naciéramos. Dios y Jesús crearon la plataforma para la redención de la humanidad (Juan 3:16). Todo pecador deformado (Romanos 5:12), destronado (Romanos 3:23) y esperando la muerte (Romanos 6:23). La sangre de Jesús ha traído perdón (Efesios 1:7), restauración (Hebreos 9:15) y salvación (Hechos 4:12; 1 Timoteo 2:5 – 6) a todo aquel que le recibe a Él (1 Juan 1:8 – 9) haciéndoles así parte de la familia de Dios (Juan 1:12, 1 Corintios 1:9). Dios también nos ha dado una herencia (Hechos 26:18). El poder salvador en la sangre de Jesús neutraliza y destruye todo pacto del diablo en el que hayamos entrado erróneamente o por nuestra ignorancia (Colosenses 2:13 – 14).
CONCLUSIÓN: La sangre de Jesús es el pacto de Dios para la remisión del pecado. Para disfrutar todos los beneficios de este pacto, debes de aceptar el sacrificio que Jesús ofrece a través de Su sangre (Hebreos 9:28).
PREGUNTAS
- ¿Cómo de significativa es la sangre? Explícalo
- ¿Cómo puede la sangre de Jesús liberar a los pecadores y aquellos que son cautivos de otros pactos de sangre?
OTRA LECTURA
- LUNES: Génesis 17:7
- MARTES: hechos 7:8
- MIÉRCOLES: Lucas 22:20
- JUEVES: Colosenses 2:13 – 14
- VIERNES: Gálatas 3:17
- SÁBADO: Hebreos 9:11 – 14
- DOMINGO: 1 Corintios 11:25
TAREA: Comparte la experiencia de cómo obtuviste perdón y salvación a través de la sangre de Jesús.