ORACIONES QUE HACEN TEMBLAR LA TIERRA
Memoriza: «Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.» Hechos 4:31
Lee: Hechos 4:23 – 31
Los creyentes piden confianza y valor
23 Y puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho.
24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay;
25 que por boca de David tu siervo dijiste:
¿Por qué se amotinan las gentes,
Y los pueblos piensan cosas vanas?
26 Se reunieron los reyes de la tierra,
Y los príncipes se juntaron en uno
Contra el Señor, y contra su Cristo. m
27 Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel,
28 para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera.
29 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra,
30 mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús.
31 Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: Hechos 20:4 . 23:35
MENSAJE
Hay ciertas oraciones que hacen temblar la tierra. No la oración de «dame esto, Dios dame lo otro». Estoy hablando de oraciones de dedicación , oraciones como «Señor, mi vida esta a Tú disposición, haz lo que quieras con ella. Postro mi vida sobre el altar y me convierto en un sacrificio vivo para Ti hoy; Señor, úsame para Tu gloria». Cuando Dios empieza a escuchar este tipo de oraciones. Él desciende. Hechos 4:23 – 31 nos cuenta que los discípulos estaban orando y después algunas personas les dijeron que predicaran el evangelio de nuevo. Se reunieron todos justos y dijeron «Padre, ¿estás escuchando lo que están diciendo sobre Ti? Lo único que te pedimos es que nos des la valentía, danos los milagros, danos las señales, para que podamos predicar más». La Biblia dice que la casa tembló.
En 1979, mi padre en el Señor me llamó y a otros cuatro a su habitación en la última planta del Hotel Mayor en Tulsa, Estados Unidos diciendo «MIs hijos, me voy pronto; el que me precederá es Pastor Adeboye» Me caí al suelo y todo el mundo empezó a orar. Puedes estar seguro de que las oraciones que ofrecieron no fueron las más elegantes, fueron oraciones serias. De repente oímos que tocaban a la puerta. Cuando abrimos la puerta, vimos a un hombre del mantenimiento del hotel que preguntó qué tipo de instrumentos musicales estábamos tocando. Explicamos que no estábamos tocando ningún instrumento , pero él insistió que teníamos que estar tocando algún instrumento, porque el hotel estaba temblando y la fuente del temblor había sido rastreada hasta nuestra habitación. Nosotros insistimos en que solo estábamos orando, pero no nos creyeron, así que él buscó debajo de la cama, el armario, y miró por todas partes en la habitación y entonces se fue cuando no encontró nada. El hotel fue cerrado porque no pudieron encontrar la fuente del temblor y no quisieron creer que fueron simplemente oraciones. Recientemente volví a ese hotel y cuando miraba el hotel, sentí compasión por los dueños, así que puse mis manos en la pared e hice un simple oración. El hotel fue reabierto seis meses después.
Es cierto que hay grandes cosas que suceden en la Iglesia Cristiana Redimida de Dios hoy son el resultado de las fatídicas oraciones ese día en nuestra habitación de hotel de Tulsa. Si quieres que la gloria de Dios desciendo sobre tu vida y transforme todo para bien, necesitas empezar a orar oraciones que hagan temblar la tierra. Ora por que el poder para hacer la obra de Dios, ora por valentía para predicar en cualquier situación, ora por una avivamiento en tu país.
Llamada a la Acción: Ve y ora algunas oraciones que hagan temblar la tierra ahora.