Devocional Cielos Abiertos

DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS – MIÉRCOLES 11 DE NOVIEMBRE DE 2020 – DISCIPULADO CRISTIANO (IV)

DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS – MIÉRCOLES 11 DE NOVIEMBRE DE 2020 – DISCIPULADO CRISTIANO (IV)

Memoriza: «En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.« Hechos 20:35

Lee: 1 Corintios 9:1 – 11

¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor nuestro? ¿No sois vosotros mi obra en el Señor?

Si para otros no soy apóstol, para vosotros ciertamente lo soy; porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor.

Contra los que me acusan, esta es mi defensa:

¿Acaso no tenemos derecho de comer y beber?

¿No tenemos derecho de traer con nosotros una hermana por mujer como también los otros apóstoles, y los hermanos del Señor, y Cefas?

¿O sólo yo y Bernabé no tenemos derecho de no trabajar?

¿Quién fue jamás soldado a sus propias expensas? ¿Quién planta viña y no come de su fruto? ¿O quién apacienta el rebaño y no toma de la leche del rebaño?

¿Digo esto sólo como hombre? ¿No dice esto también la ley?

Porque en la ley de Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado de los bueyes,

10 o lo dice enteramente por nosotros? Pues por nosotros se escribió; porque con esperanza debe arar el que ara, y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto.

11 Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si segáremos de vosotros lo material?

BIBLIA EN UN AÑO: Mateo 27;, Marcos 15

MENSAJE

He observado que cuando algunas personas dicen que quieren un tutor o un mentor, lo que están buscando en realidad es un esponsor. Tu tutor o mentor no tiene la obligación de financiarte. Si acaso, tú deberías ser el que le compensara a él o ella, poniéndote a su disposición para ayudar en cualquier forma que puedas.

Tú necesitas su riqueza en experiencia. Tu relación con tu tutor y mentor no debe de ser parasitaria sino simbiótica – a medida que él o ella te dan de su experiencia y sabiduría, tú también tiene s que dar en retorno. Pablo dijo en 1 Corintios 9:11:

«Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si segáremos de vosotros lo material?»

Es tu responsabilidad hacer que tu tutor o mentor se sienta orgulloso. Muchas veces, he tenido que responder por las acciones de mis hijos en el Señor, tanto como si estaba enterado o no. No sería justo para tu tutor o mentor si tu te comportas mal, porque podría darle a él o ella una mala imagen pública.

Finalmente, incluso si tú te haces rico, más grande y popular que tu tutor o mentor, debes de permanecer en una posición de total respeto hacia él o ella. Jesús dijo que el discípulo no puede ser mayor que su maestro (Mateo 10:24). Si la persona con la que Dios te ha conectado para ser discipulado es así, no importa lo que haga, debes de permanecer en total respeto, en línea con la palabra de Dios, hasta la muerte.

David se volvió más famoso que Saúl, pero él nunca perdió su respeto hacia él, ni siquiera cuando Saúl estaba intentando matarle. Samuel fue quien Dios mandó a decir a Eli como él caería, pero Samuel nunca sintió que, porque él había sido elegido para sustituir a Eli, éste tenía que ser ignorado (1 Samuel 3:9 – 21).

Nunca deshonres a aquel que te discipula. Dios no permitirá que nadie le falte al respeto a las vasijas que Él ha elegido (Salmos 105:14 – 15), no importa lo pequeña y poco consecuente que tú consideres que es la acción. Aprende del error de Miriam y Aaron (Números 12:1 – 15).

Sí, Jesús quiere que nosotros hagamos obras aún más grandes que las que Él hizo, pero eso no nos puede hacer mas grandiosos que Él. Nunca olvides que un discípulo puede lograr hazañas más grandes que su maestro, pero no puede ser más grandioso que él o ella. (Mateo 10:24).

Reflexión: ¿Tienes una relación parasitaria o simbiótica con tu tutor o mentor ?