DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS – JUEVES 10 DE SEPTIEMBRE DE 2020 – SED TRANSFORMADOS
Memoriza: “Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.” 1 Timoteo 1:15
Lee: 1 Corintios 6:9 – 11
9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.
11 Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: Ezequiel 44 – 45
MENSAJE
Hay ciertas cosas que Dios ve como abominaciones. Estas cosas ponen una barrera entre Él y la persona.
Las abominaciones o pecados, han permanecido en el mundo desde la caída del hombre. Romanos 3:23 dice por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,“ Pablo, en Romanos 7:24, se lamentó de lo miserable que era la vida de un pecador.
Sin embargo, cuando alguien nace de nuevo, se produce una transformación que le aparta de las abominaciones.
Jesús es el único transformador de vida (Hechos 4:12). Por eso después de conocer a Jesús, Pablo fue capaz de hacer la declaración del versículo a memorizar de hoy. Jesús pagó el precio supremo para redimirnos de la maldición de la ley (Mateo 26:28). En mateo 11:28, Él hizo un llamado a la transformación de todas las personas y Él sigue llamándote a tí hoy. Él quiere que seas liberado de toda carga de pecado dándote poder para vivir por encima de ello.
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” 2 Corintios 5:17
Si hemos de ser salvos al final, y caminar dignamente según nuestro llamado, debemos de saber que contestar al llamado a la transformación es innegociable. Esta es la voluntad de Dios para nosotros como vemos en Romanos 12:2;
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
Una vez que hayas entregado tu ser a Dios, Él empezará la obra de transformación en tu vida. Hoy, la elección de transformación y liberación ha sido puesta en tus manos. Contesta al llamado divino ahora.
Punto de oración: Padre, haz que haya una renovación de mi mente cada día, en línea con Tu voluntad perfecta, en el poderoso nombre de Jesús.