DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS – JUEVES 9 DE JULIO 2020- Y DOS SERÁN UNA SOLA CARNE
Memoriza:“Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, no yo, sino el Señor: Que la mujer no se separe del marido;” 1 Corirntios 7:10
Lee:Mateo 5:27 – 32
27 Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio.
28 Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.
29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
31 También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio.
32 Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio.
BIBLIA EN UN AÑO: Isaías 5 – 8
MENSAJE
En el principio, Dios instituyó el matrimonio como la solución perfecta para los problemas del hombre solitario que necesitaba una compañía y una ayuda para cumplir el mandato divino de Génesis 1:28 de “…Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla,” Habiendo ofrecido una solución perfecta y permanente a la necesidad humana de tener compañía y ayuda, Dios advirtió en contra de la separación o el divorcio en Mateo 19:6 diciendo:
“Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.“
La Biblia no dice que el hombre y la mujer se convertirán en uno físicamente, pero que a través del pacto del matrimonio se unirán espiritualmente como uno – unidos en amor, fe, espíritu y propósito. Por eso el matrimonio viene con graves implicaciones para aquellos que se unen en yugo desigual con no creyentes, o aquellos que se unen a la persona errónea. Ese tipo de casos a menudo llevan a la crisis, inestabilidad y destino incumplido. Sin embargo, Dios frunce el ceño ante cualquier forma de separación o divorcio; más bien Él está particularmente interesado en mantener el santo matrimonio. Oro porque cualquier que esté pasando por una crisis matrimonial; El Príncipe de paz intervendrá en tu matrimonio hoy, en el poderoso nombre de Jesús.
Dios odia el divorcio y Él dice esto claramente en Malaquías 2:16. Él sigue diciendo en 1 Corintios 7: 10 – 11 que: “… Que la mujer no se separe del marido; y si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; y que el marido no abandone a su mujer.” En el plan de Dios solo la muerte puede anular el pacto del matrimonio, como se explica en Romanos 7:2 -3.
Todos los Cristianos deben por lo tanto, asegurarse de que defienden el santo matrimonio a través del amor, la humildad y la coexistencia pacífica el uno con el otro. (Efesios 4:1 – 3).
Punto de Oración: Padre, ayúdame a construir y defender un matrimonio pacífico en el poderoso nombre de Jesús.