Memoriza“Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.“ Mateo 5:10
Lee: Marcos 10: 29 – 30
“29 Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio,
30 que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna.”
BIBLIA EN UN AÑO: Proverbios 25 – 26
MENSAJE
Cuando se acercaba el momento de la partida de nuestro Señor Jesús, Él le dijo a Sus discípulos las cosas que les sucedería para que no les pillara de improvisto. El hecho de que los discípulos sufrirían odio fue el punto central de esta discusión en particular. Juan 15:20 dice;
“Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.“
Jesús advirtió a Sus discípulos por adelantado de que el mundo les odiaría porque le había odiado a Él. Jesús sufrió odio en forma de difamación, tergiversación, rechazo, acoso, asalto, abuso, crucifixión, y finalmente la muerte. En esencia, Jesús dejó claro que Sus discípulos debían prepararse para recibir el mismo trato de parte de la gente. Esta profecía no se limitaba a los que estaban presentes físicamente con Él en ese momento, sino que también se aplica a todos los que seguirían a Jesús y vivieran como verdaderos discípulos.
Los Cristianos en la actualidad están sufriendo dificultades indecibles, inseguridad, acoso, brutalidad, asalto y asesinato en varias partes del mundo. De hecho Jesús dijo que venía un tiempo cuando las personas matarían Cristianos y considerarían esto como un favor a Dios (Juan 16:2)
Si tu eres un verdadero hijo de Dios, debes de ser capaz de declarar como lo hizo Pablo en Filipenses 3:10; “a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte,” Romanos 8:17 dice; “…si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.”
Es verdaderamente un privilegio el ser partícipes del sufrimiento de Dios. No importa las dificultades o la persecución por la que estés pasando, considéralo todo como gozo (Santiago 1:2 -3).
Que el Señor te conceda la gracia para vencer en tiempos de persecución. El Reino de Dios es para aquellos que son partícipes de Su sufrimiento. Ciertamente tú lo conseguirás, en el poderoso nombre de Jesús.
Punto de Oración: Señor por favor, haz que todos nosotros que compartimos Tu sufrimiento seamos glorificados contigo, en el poderoso nombre de Jesús.