Devocional Cielos Abiertos

MATRIMONIO: EL EJEMPLO DE CRISTO (PARTE 1)

Memoriza: “porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.” Efesios 5:23

Lee: Efesios 5:22 – 30

22 Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;

23 porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.

24 Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.

25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella,

26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra,

27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.

28 Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.

29 Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia,

30 porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.”

BIBLIA EN UN AÑO: Proverbios 7 – 9

MENSAJE

“Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.” Génesis 2:24

Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.” Efesios 5:32

La unión de un hombre y una mujer en matrimonio es un misterio porque esconde, como en una parábola, una verdad sobe Cristo y la Iglesia.

La realidad divina en el concepto de matrimonio es que Dios ordenó una unión permanente entre Su Hijo y la Iglesia. El matrimonio entre un hombre y una mujer es la representación terrenal de este plan divino. Como Dios deseó para Cristo y la Iglesia que se convirtieran en un solo cuerpo (Gálatas 3:28, 1 Corintios 12:13), así que Él desea que el matrimonio refleje este patrón.

Los esposos y las esposas deben de conscientemente copiar el modelo de Dios de la relación entre Cristo y la Iglesia . Algunas características esenciales del modelo divino son los siguientes:

Primeramente, la Iglesia tiene que ser guiada por Cristo así como la mujer tiene que ser guiada por su marido. La responsabilidad del hombre es ver la visión para la familia y la responsabilidad de la mujer es someterse al liderazgo de su marido a medida que trabajan juntos para conseguirlo.

También es la responsabilidad de Cristo el proveer mientras que la Iglesia pone los recursos en uso para conseguir el objetivo conjunto. El hombre debe proveer para el hogar, de hecho, 1 Timoteo 5:8 describe que cualquier que no provee para su hogar es igual que un infiel que ha rechazado la fe. La mujer, por otro lado, tiene que usar los recursos que el hombre (al mismo tiempo que apoya en todo lo que puede) para el bien del hogar, no para comprar frivolidades, joyas o zapatos, excepto cuando el hombre ha provisto específicamente para eso. La mujer siendo de ayuda, debe sin embargo apoyar al hombre en todo lo posible (Génesis 2:18, Efesios 5:22).

Si pudiéramos modelar nuestro matrimonio de acuerdo con la relación entre Cristo y la Iglesia, tendríamos más matrimonios con éxito hoy en día.

Llamada a la Acción: Como Cristo, esposo, tu eres el sacerdote y el proveedor de tu hogar. Toma tu responsabilidad y pídele a Dios que te ayude.